Hace tiempo que perdí la sana costumbre de escribir en blog
a menudo… pero ya lo sabéis. Así que tratare de empezar sin rodeos.
La sociedad y la vida. Son unos temas que me apasionan.
Desde que descubrir el placer del preguntarme también el “¿Por qué?” de esto,
al menos de manera consciente, no hago más que darle vueltas. El cómo soy tiene
mucho que ver con el que viví, como quienes me conocen saben.
Hoy estando esperando en la biblioteca, me dio por buscar
algún manga. Me tope con uno de titulo “17 años”. Apenas he sido capaz de leerlo.
Una historia cruda… como la realidad. El secuestro y violación de una joven
estudiante. Apenas he sido capaz de leerlo a trazos y por encima. No puedo. Mi
empatía me lo impide. No puedo evitar pensar en los miles de casos de
desaparecidos, y cuantos pueden ser tan o más crudo que esto.
Manga en cuestión.
Recomendable para reflexionar un poco hasta cuanto cerramos demasiado a menudo los ojos.
Busque cifras por internet. Como mucho un artículo de 2007
cita a mas de 12.000 mil desaparecidos solo en España. Doce mil almas.
Porque esta es nuestra “actual” sociedad.
Bajo el paraguas de que “cada uno recoge lo que siembra”
para bien o para mal, vivimos en una comunidad en donde cada uno mira solo por sí
mismo, y solo miramos por alguien más con quien no nos una un vinculo muy
cercano si su problema nos afecta en algo.
Y lo más gracioso es la postura que tomamos cada uno ante esto. O
defendemos a ultranza el que cada uno tiene lo que se merece, o de manera
extremista el que hay que mirar siempre por todo y el que tiene más que la mayoría
algo malo a echo… o, como suele ser lo más sano, eres alguien que piensa en el término
medio.
Algunos cosechan lo que siembran, pero otros en parte es por algo que no
pueden controlar o por dios sabe que…
¿Lo malo? Que estos últimos son probablemente mayoría… y
mayoría apática. No reaccionan. Ven lo que pasa alrededor y se dejan llevar por
un “mejor no me meto en líos”
Ven como la gente se queda sin casa, y encima debiendo
seguir pagándola y con intereses…
Ven como el vecino se queda sin empleo en una empresa que
dio beneficios el año pasado…
Ven como el chaval de abajo dejo los estudios por un sistema
caduco…
Ven, observan, miran y se van. Conmigo no es… ya si me toca
a mí me acordaré.
"Primero vinieron a buscar a los comunistas, y yo no hablé porque no era comunista. Después vinieron por los socialistas y los sindicalistas, y yo no hablé porque no era lo uno ni lo otro. Después vinieron por los judíos, y yo no hablé porque no era judío. Después vinieron por mí, y para ese momento ya no quedaba nadie que pudiera hablar por mí"- Nota: 1945, Martin Niemoeller (pastor protestante, 1892-1984). Erróneamente atribuida a Brecht.
No hago más que comerme el coco… ¿cómo es posible que cuando
hemos alcanzado después de siglos luchando por ello una vida digna la mayoría
de la población, sea ahora cuando hemos empezado a ser tan egoístas? ¿Cuando
dejamos tan de lado la humanidad que vemos a alguien tirado en la calle y
pensamos “estará borracho o algo” y pasamos de lado?
Luego nos extraña que desaparezcan conocidos y nadie de con
ellos. Que el vecino de toda la vida se quede sin casa ni trabajo a costa de un
banco y una empresa que sigue ganando… cuando no estaba en una pequeña empresa
ahogada por la grande.
No es cuestión de lo que te digan que puedes hacer, de si tendrá repercusión o no.
Es cuestión de que HAGAS lo que creas que debes HACER.
Si… el sistema tiene fallas… y ya me pondré otro día a
relatar un montón de puntos que, a mi juicio personal, debería cambiar… pero
ahora lo que te pregunto a ti, querido lector… ¿De verdad crees que todo lo que
acabo de decir va con otros, o te identificas aunque sea solo en parte, como me
pasa a mi? ¿Sigues creyendo que no puedes cambiar nada o excusándote en que tu
solo no harás la diferencia? ¿Cuándo dejaste de lado tus principios?...
y,
sobre todo, ¿te atreves a responder a algunas de tantas preguntas aquí?